jueves, 22 de febrero de 2007

Pensar la universidad pública (paguen vivos)


A propósito de la reciente polémica sobre la gratuidad de la enseñanza en las universidades públicas generada por el proyecto de Ley de la fujimorista Martha Hildebrandt, recordamos un breve artículo de Boaventura de Sousa Santos, reconocido científico social, impulsor de los movimientos alter hegemónicos y del Foro Social Mundial.

El artículo tiene el mérito de sacar la discusión de los márgenes estrechos en que ha sido planteada (con toda intención) por sectores neoliberales o próximos a ellos. Estos han buscado concentrar la atención de la opinión pública en la ineficacia del gasto, la demostración de la capacidad de pago de la clase media versus la falta de recursos del Estado, y lo injusto que es que todos, incluyendo pobres extremos, sostengan la educación de unos pocos con plata.

Ahorro pues y hacer más eficaz el gasto, como argumentos serios economicistas. Y como argumento subliminal, crear una contradicción entre pobres sacrificados y clase media viva.

En este pequeño artículo Boaventura llama la atención sobre aspectos ya analizados en profundidad en publicaciones anteriores como La universidad en el siglo XXI. Para una reforma democrática y emancipadora de la Universidad de 1994 y el reciente La universidad popular del siglo XXI.

Ubica el tema como un problema global, de crisis múltiples (pérdida de hegemonía, legitimidad y la crisis institucional) vinculadas con la pérdida de prioridad de la universidad para el Estado y el avance del neoliberalismo.

Quizá lo más importante para el caso de nuestra doméstica discusión, es que Boaventura brinda elementos para contextualizar estas medidas que van reduciendo el derecho de gratuidad (entre otros problemas de la universidad pública) en un proceso de desarrollo vigoroso de un mercado mundial universitario, diseño impulsado desde centros de poder como el Banco Mundial y donde el estudiante se convertirá cada vez más en un consumidor (y la inteligencia cada vez más homogenea).


José Carlos Agüero
Iprodes

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